Esta área protegida, que sube desde la costa hasta los 2,485 msnm de su cima más alta, es uno de los parques nacionales más ricos en biodiversidad de Honduras.
Un lugar para la aventura, el encuentro con la naturaleza o consigo mismo y experiencias tan diversas como la vida que lo habita en muchas formas.

La humedad verde del bosque nublado del Parque Nacional La Tigra, el pasado minero en el camino, los sabores de campo y mundo, el arte y las artesanías son razones suficientes para acercarte a este municipio, casi 30 km al noreste de Tegucigalpa.

Si quieres naturaleza puedes seguir, entre bocaminas, el sendero menos explorado de La Tigra hasta una cascada hogar de golondrinas. Llegando al pueblo encuentras casi todo el año actividades artísticas y culturales alrededor del parque central, en las galerías y los cafés/ restaurantes-galerías.